La esencia del descanso y la recuperación en el entrenamiento se encuentra en que el proceso de entrenamiento puede entenderse como un sistema de gestión de adaptaciones, en el que se expone al atleta a estímulos que provocan respuestas fisiológicas y, posteriormente, se induce la recuperación para permitir la adaptación (Bompa y Buzzichelli, 2019). Sin una recuperación adecuada, no puede producirse adaptación.
Adaptación y fatiga: La capacidad del atleta para adaptarse a las cargas impuestas por el entrenamiento y la competición es fundamental. Si no se logra adaptar a estas cargas variables, puede acumular niveles críticos de fatiga, sobrecarga funcional o incluso sobreentrenamiento, lo que impedirá alcanzar los objetivos de rendimiento (Bompa y Buzzichelli, 2019).
Fundamento de la periodización: El objetivo del entrenamiento es incrementar progresiva y sistemáticamente el estímulo (intensidad, volumen y frecuencia) para inducir adaptaciones superiores y mejorar el rendimiento. Para lograr las mejores adaptaciones, es esencial alternar racionalmente las intensidades y volúmenes de entrenamiento e incluir períodos de recuperación entre sesiones. Esta alternancia entre carga y descanso constituye la base de la planificación cíclica, conocida como periodización, y del fenómeno de la supercompensación (Bompa y Buzzichelli, 2019).
Supercompensación: Este es considerado el concepto más importante en el entrenamiento, ya que su correcta aplicación asegura la restauración de las reservas energéticas y, sobre todo, ayuda a evitar niveles críticos de fatiga que podrían derivar en sobreentrenamiento (Bompa y Buzzichelli, 2019).
Fuente: Bompa, T. O., y Buzzichelli, C. (2019). Periodization: Theory and methodology of training (6th ed.). Human Kinetics.